En su origen, se
utilizaba como crema hidratante con efectos terapéuticos en
Alemania, ya que se aplicaba a las pieles después de haber sido
tratadas de peeling, láser, o microdermoabrasión en clínicas
especializadas. Pero ha sido en los países asiáticos en donde se
interesaron por los poderes curativos y cicatrizantes de la crema, y
empezaron a comercializarla para las mujeres de a pie.
Hoy en día, son
múltiples las marcas de cosmética que ponen a nuestro alcance los
beneficios de las BB Creams. Son bálsamos anti-imperfecciones que
calman la piel y suavizan las imperfecciones como rojeces, manchas y
marcas de acné. Mantienen el resplandor natural de la piel y evitan
ese efecto máscara del que os hablaba al principio del maquillaje ya
que no obstruye los poros. Además de todo eso, tendremos el cutis
perfectamente protegido por la protección UV que contiene.
Podemos encontrarlas de muchas marcas y precios, aquí os ofrezco un pequeño listado de las que más me han llamado la atención:
- Perfeccionador Prodigioso Garnier: apta para todo tipo de pieles; 12, 95€.
- Nude Magique L’Oreal: con microcapsulas de color que se rompen al contacto con la piel; 9,95€.
- BB Crème Hydra Life Dior: base casi transparente para todas las tonalidades de piel; 40€.
- Pure Radiant Tinted Moisturizer Nars: crema con color, hidratante y con SPF 30; 38€.
- Perfect Cover BB Cream Missha: de origen coreano, deja apariencia de porcelana. A la venta por internet, alrededor de 15€.
- Crema Hidratante Babaria: para todo tipo de pieles, deja un acabado perfecto; 8€
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